La Agencia Neuquina de Innovación para el Desarrollo (Anide) definió su hoja de ruta para los próximos años, con una orientación clara hacia la promoción del conocimiento, la articulación territorial y el fortalecimiento del sistema científico provincial. Así lo expresó el secretario ejecutivo permanente, Joaquín Perrén, quien destacó la necesidad de consolidar un modelo de “ciencia en territorio” como política estratégica del Gobierno neuquino.
Perrén planteó que, frente a un escenario nacional marcado por una contracción sostenida del financiamiento en ciencia y tecnología, la provincia ha tomado la decisión política de sostener y acompañar a su comunidad científica mediante la provisión de equipamiento, convenios de cooperación y asistencia técnica. “Es un enorme desafío poner en marcha un modelo de ciencia en territorio. Ese será el principal objetivo para los próximos dos años”, afirmó.
El funcionario sintetizó la agenda de Anide en tres metas centrales:
Promover la producción científica local con enfoque territorial.
Fomentar vocaciones científicas, impulsando el tránsito desde la curiosidad hacia carreras de investigación.
Comunicar de manera pública y accesible el trabajo científico, para fortalecer el vínculo social con la innovación.
En este marco, Perrén llamó a que investigadores e investigadoras mantengan su agenda académica pero incorporen con mayor decisión la resolución de problemáticas productivas, sociales y comunitarias propias de la provincia. “La ciencia es parte del futuro y una herramienta de solución, nunca un problema”, subrayó.
Asimismo, destacó al equipo técnico que acompaña la gestión, con trayectoria en robótica, economía del conocimiento y líneas de crédito específicas para proyectos innovadores. Anide continuará promoviendo iniciativas como la Liga Robótica Neuquina, el Hackathon, y diversas jornadas de resolución de desafíos concretos para estudiantes universitarios.
Finalmente, el secretario ejecutivo anticipó que se fortalecerán las líneas crediticias para innovadores y que se profundizará la conexión entre las demandas del territorio y la capacidad científica provincial, con el financiamiento del Gobierno neuquino como eje articulador.
