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Messi vuelve a Rosario para pasar las Fiestas tras una gira caótica por la India

El capitán de la Selección argentina arribará este miércoles en vuelo privado junto a Antonela Roccuzzo y sus hijos. Pasará Navidad y Año Nuevo en Funes tras una gira internacional marcada por incidentes en la India.

DeportesRedacciónRedacción

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Lionel Messi regresará este miércoles a la Argentina para pasar las Fiestas en Rosario junto a su familia, como lo hace cada año. El capitán de la Selección arribará en un vuelo privado acompañado por Antonela Roccuzzo y sus hijos, Thiago, Mateo y Ciro, luego de una gira internacional que incluyó un paso accidentado por la India y la celebración de la “Messi Cup” en Estados Unidos.

Según trascendió, el avión aterrizará en el Aeropuerto de Sauce Viejo, en Santa Fe, ya que el Aeropuerto Internacional de Rosario permanece cerrado por obras de remodelación. Si bien la llegada estaba prevista para las 8, se informó un leve retraso y se espera que ocurra cerca de las 10, en medio de un fuerte operativo de seguridad y la presencia de fanáticos.

Tras completar los trámites migratorios, Messi se trasladará por vía terrestre hasta el country de Funes, donde suele alojarse durante sus vacaciones en la ciudad. La intención del campeón del mundo es permanecer en Rosario durante Navidad y Año Nuevo y quedarse hasta el 3 de enero, fecha en la que se celebrará el casamiento de su hermana menor, María Sol, con Julián “Tuli” Arellano, integrante del cuerpo técnico de la Sub 19 de Inter Miami.

El regreso del rosarino a Estados Unidos se daría durante la segunda semana de enero, en sintonía con el inicio de la pretemporada de Inter Miami y el calendario competitivo del club.

  El escándalo en la India

La gira de Messi por la India quedó marcada por graves incidentes durante la inauguración de una estatua en su homenaje en el estadio Salt Lake de Calcuta. El evento terminó con destrozos, caos y la detención del organizador principal.

El capitán argentino permaneció apenas diez minutos en el lugar y se retiró por razones de seguridad ante la falta de organización. Messi ni siquiera pudo acercarse a las tribunas y fue rodeado en el campo por políticos locales y sus familias, lo que impidió cualquier contacto con el público. La situación derivó en disturbios y obligó a la intervención policial.