
Neuquén continúa consolidando una política de integración binacional que trasciende gestiones. Con la mira puesta en el desarrollo territorial y el fortalecimiento de los vínculos económicos, culturales y turísticos con Chile, la provincia avanza con dos obras clave en el entorno del paso internacional Mamuil Malal: la pavimentación de la Ruta Provincial 60 y la extensión de la línea eléctrica hasta el complejo fronterizo.
Aunque la administración y operatividad de los pasos dependen del Gobierno nacional, la gestión de Rolando Figueroa resolvió priorizar la infraestructura fronteriza como política de Estado. El objetivo: garantizar conectividad permanente, mejorar la seguridad vial y potenciar el flujo turístico hacia y desde las regiones trasandinas.
Actualmente, equipos viales y personal del Ente Provincial de Energía del Neuquén (EPEN) trabajan simultáneamente en ambos frentes. La electrificación está prevista para finalizar este año, mientras que la pavimentación —una obra de mayor envergadura— continuará durante 2026.
El cuarto paso completamente pavimentado
Con la culminación del asfaltado de los 12,24 kilómetros que van desde el portal del Parque Nacional Lanín hasta el límite internacional, Neuquén alcanzará su cuarto paso pavimentado: una mejora estratégica que se sumará a los ya consolidados Pino Hachado, Cardenal Samoré e Icalma.
La obra es financiada por CAF–Banco de Desarrollo de América Latina y posee un plazo contractual de ejecución de 18 meses corridos.
Del lado chileno, la conectividad ya está garantizada mediante la Ruta 199, que vincula a Mamuil Malal con polos turísticos de alta demanda como Pucón, Villarrica y Temuco. Esto convierte al corredor en una vía de integración fundamental para el turismo binacional y la actividad comercial de ambas regiones.






