Kicillof cruzó a Milei por no ser invitado a la reunión con gobernadores: “Está construyendo la foto que le pidió Trump”

El gobernador bonaerense Axel Kicillof respondió con dureza al presidente Javier Milei, luego de quedar fuera de la convocatoria a la reunión con los gobernadores “dialoguistas” que el mandatario nacional realizará este jueves en Casa Rosada.

“Tampoco me llamaron para decirme ‘no te invitamos’. Hay una decisión tomada. El gobierno está construyendo la foto que le pidió Trump”, sostuvo Kicillof en diálogo con Radio 10.
La exclusión no fue casual: además de Kicillof, quedaron fuera Ricardo Quintela (La Rioja), Gildo Insfrán (Formosa) y Gustavo Melella (Tierra del Fuego), todos mandatarios peronistas.

Kicillof consideró que Milei “comete un error” al marginar a parte de los gobernadores del país:

“Mi intención es intercambiar seriamente y respetuosamente. A mí no me pueden achacar insultos ni maltrato, aunque él lo tiene por deporte. Lo que pasa por alto es que representamos casi la mitad del país”, remarcó.
En ese sentido, el mandatario bonaerense cuestionó la falta de federalismo en la gestión libertaria:

“Que no pueda sentarse a discutir o a cambiar puntos de vista habla de las limitaciones que tiene y de los planes que impulsa”, expresó.
El jefe de Gabinete Guillermo Francos había justificado la exclusión al señalar que “Kicillof hizo reclamos que no correspondían” y que el Gobierno “prefiere convocar a quienes tengan vocación de acuerdo y no de confrontación”.

Kicillof respondió recordando que la provincia de Buenos Aires aporta el 40% de la recaudación nacional, y que, por lo tanto, debería ser parte de cualquier debate fiscal o laboral.

“Tenemos el grueso de la fuerza de trabajo, la industria y también las mayores dificultades que produce el programa de Milei”, explicó.
El mandatario también volvió a reclamar por los fondos retenidos por Nación, una disputa que ya llegó a la Corte Suprema de Justicia.

“Han tomado decisiones ilegales, quitando fondos establecidos por ley. Milei tiene un desprecio fuerte por el federalismo y la división de poderes. Me da pena que sea un presidente que no pueda aceptar críticas ni otras voces”, concluyó.