

Puerto Madryn se convirtió en el escenario de una cumbre reservada donde los gobernadores de Provincias Unidas profundizaron su estrategia electoral con miras al 26 de octubre. Entre platos sencillos y un clima de distensión, Ignacio Torres (Chubut) recibió a Martín Llaryora (Córdoba), Juan Schiaretti, Maximiliano Pullaro (Santa Fe), Gustavo Valdés (Corrientes), Carlos Sadir (Jujuy) y Claudio Vidal (Santa Cruz). Allí, lejos de las cámaras, los mandatarios definieron los lineamientos políticos que los posicionan como la principal fuerza opositora frente al presidente Javier Milei.
La conversación giró en torno a dos ejes centrales: cuestionar con fuerza el plan económico oficialista y presentar a Provincias Unidas como un bloque con capacidad de gestión, superávit fiscal y propuestas de desarrollo que trasciendan la coyuntura recesiva.
Una oposición con guion definido
El grupo acordó intensificar el discurso contra lo que denominan la “receta recesiva” del Gobierno nacional. Según coincidieron, Milei concentra su capital político en la reducción de la inflación a costa de un freno económico que deteriora empleo, consumo y producción.
“Gobernar induciendo la recesión no es gobernar: es ajustar por martillazos”, lanzó Schiaretti, quien asumió la tarea de encabezar el tono crítico en esta etapa de campaña. El planteo fue respaldado por el resto de los mandatarios, que definieron apuntar al contraste: mostrar gestiones provinciales con equilibrio fiscal, inversión en obra pública y políticas de generación de empleo genuino.
La proyección política
Si bien la estrategia inmediata apunta a consolidar el voto opositor en las legislativas, los gobernadores dejaron en claro que el proyecto es de mayor alcance: construir una alternativa presidencial para 2027. Llaryora y Pullaro fueron los encargados de subrayar que la liga de gobernadores no busca “una vía intermedia”, sino encarnar “lo nuevo”, lejos tanto del kirchnerismo como del mileísmo.
En ese marco, circuló con fuerza la posibilidad de sumar a Alfredo Cornejo (Mendoza) después de octubre. Aunque desde su entorno relativizan el pase, varios dirigentes del radicalismo dan por hecho que el mendocino se incorporará al esquema.
Del encuentro privado al escenario público
La intimidad de Puerto Madryn fue la antesala del acto en el hotel Rayentray, donde los siete mandatarios llevaron a la arena pública lo conversado en privado. Allí reforzaron los conceptos que ya forman parte de su libreto electoral: rechazo a la “timba financiera”, necesidad de terminar con la “Argentina pendular” y compromiso con el desarrollo productivo federal.
El cierre de la jornada incluyó una visita a la planta de Aluar, símbolo industrial de la Patagonia, y la definición de próximos pasos: el 9 de octubre volverán a reunirse en Jujuy y el 15 cerrarán la gira federal en la Ciudad de Buenos Aires, con Martín Lousteau como figura invitada al escenario.
El trasfondo político
Mientras Milei enfrenta tropiezos en su gira por el sur, Provincias Unidas busca capitalizar el desgaste presidencial y posicionarse como la contracara: un bloque que se muestra cohesionado, con gestión territorial y con una narrativa nacional en expansión.
El encuentro en Madryn fue, más que una cena entre gobernadores, la confirmación de una estrategia política que se endurece y se proyecta más allá de octubre.

Cristina Kirchner advierte sobre devaluación tras las elecciones y cuestiona a Milei
"¡Ay Milei!... Me parece que se avivaron que después del domingo 26 devaluás"